Mallorca
Quizás no estemos fondeados en Baleares pero ninguna queja sobre la celebración de cumpleaños. Buena comida en Lune de Miel y cena en el Ixnoc con nuestros vecinos Conxi y Ricard. El día lo utilizamos para hacer algunas compras que teníamos pendientes: bengalas de emergencia, recambios para la bomba del WC y alguna bandera de cortesía que teníamos algo vieja (la española, que para nosotros es de cortesía, parecía más la amarilla declarando no enfermedades a bordo y petición de plática). Por la noche festival, fuegos artificiales y suelta de bolsas de papel con velas encendidas en Badalona.
El 15 de Junio volvemos a largar amarras, esta vez contamos con el honor de que nos las den Emma y Victor, que a su estela cuentan con una vuelta al Mundo a Vela (De Montserrat a los Mares del Sur, ed. Noray, Libro recomendable que nos inspiró y a mi me acompañó en muchos puentes aéreos).
Salimos con un viento suave de Este que nos deja avanzar a nuestro rumbo. La Ma
r está plana y nos movemos con tranquilidad a 3 nudos, no es mucho pero no tenemos prisa. Preparamos una buena comida y lo hacemos de forma abundante para poder tener algo para la noche por si el tiempo se turce, que es lo previsto. Vemos un grupo de delfines, no cambian de rumbo para acompañarnos, deben estar ocupados en algo más importante, estan cazando su cena, también vemos saltando grandes atunes blancos (calculamos que de unos 50Kg) y pensamos en recoger la caña, si una de estas bestias pica no sabriamos como subirla a bordo, y la nevera está llena…. Cae la noche y todo sigue igual, avanzamos y disfrutamos del cielo limpio y las fosforescencias en la estela.
Sobre las seis el viento se acelera y comenzamos a navegar con ola. Ya no podemos mantener el rumbo a Menorca, sabíamos que tarde otemprano pasaría y estuvimos ganando Este. Arrumbamos a Soller,
Mallorca, y nos queda una navegación algo más agradable, nos ponemos a correr a 6 nudos, tenemos por delante 55 millas todavía.
A 16 millas de Soller quedamos resguardados del viento de Este por la imponente Sierra de Tramontana. El viento va cayendo y nosotros ralentizando nuestro andar hasta que nos vemos obligados a encender el motor si queremos llegar hoy. A las 10 de la mañana tiramos el ancla en la bahía de Soller dónde hay entre 20 y 25 veleros fondeados. Nos vamos a descansar.
Después de dos días de relax, compramos algo de fruta, verdura y pan, también una mangera…. y nos disponemos a zarpar. Es un fondeo bonito pero no cómodo del todo, siempre entra algo de ola, no paran de entrar los barcos turísticos y charters dejando y recogiendo pasaje y dejando olitas en todas direcciones.
El 19 de Junio levamos ancla rumbo Este. Con viento por la aleta navegamos rápido
siguiendo la sierra de Tramontana, espectacular. Cuando llegamos al Cabo Formentor el viemto está fuerte, se nos ha hecho algo tarde y no hemos pescado nada… decidimos dejar para mañana el salto a la Pequeña Isla Fantástica, Menorca. Doblamos el cabo, que es un espectacular bloque alargado de roca que se adentra en la Mar en el extremos NE de Mallorca, y entramos dirección Pollença, ahora nos toca deshacer parte del camino, ceñida a rabiar con 24 nudos de Oeste. Llegamos delante de Pollença dónde un montón de veleros están fondeados. Echamos el ancla a tres metros de profundidad, se ve el fondo perfectamente. Hace tanto viento y estamos tan lejos de la playa que ni tiramos el dingui al agua. Cenita y a descansar.
El 15 de Junio volvemos a largar amarras, esta vez contamos con el honor de que nos las den Emma y Victor, que a su estela cuentan con una vuelta al Mundo a Vela (De Montserrat a los Mares del Sur, ed. Noray, Libro recomendable que nos inspiró y a mi me acompañó en muchos puentes aéreos).
Salimos con un viento suave de Este que nos deja avanzar a nuestro rumbo. La Ma
r está plana y nos movemos con tranquilidad a 3 nudos, no es mucho pero no tenemos prisa. Preparamos una buena comida y lo hacemos de forma abundante para poder tener algo para la noche por si el tiempo se turce, que es lo previsto. Vemos un grupo de delfines, no cambian de rumbo para acompañarnos, deben estar ocupados en algo más importante, estan cazando su cena, también vemos saltando grandes atunes blancos (calculamos que de unos 50Kg) y pensamos en recoger la caña, si una de estas bestias pica no sabriamos como subirla a bordo, y la nevera está llena…. Cae la noche y todo sigue igual, avanzamos y disfrutamos del cielo limpio y las fosforescencias en la estela.Sobre las seis el viento se acelera y comenzamos a navegar con ola. Ya no podemos mantener el rumbo a Menorca, sabíamos que tarde otemprano pasaría y estuvimos ganando Este. Arrumbamos a Soller,
Mallorca, y nos queda una navegación algo más agradable, nos ponemos a correr a 6 nudos, tenemos por delante 55 millas todavía.A 16 millas de Soller quedamos resguardados del viento de Este por la imponente Sierra de Tramontana. El viento va cayendo y nosotros ralentizando nuestro andar hasta que nos vemos obligados a encender el motor si queremos llegar hoy. A las 10 de la mañana tiramos el ancla en la bahía de Soller dónde hay entre 20 y 25 veleros fondeados. Nos vamos a descansar.
Después de dos días de relax, compramos algo de fruta, verdura y pan, también una mangera…. y nos disponemos a zarpar. Es un fondeo bonito pero no cómodo del todo, siempre entra algo de ola, no paran de entrar los barcos turísticos y charters dejando y recogiendo pasaje y dejando olitas en todas direcciones.
El 19 de Junio levamos ancla rumbo Este. Con viento por la aleta navegamos rápido
siguiendo la sierra de Tramontana, espectacular. Cuando llegamos al Cabo Formentor el viemto está fuerte, se nos ha hecho algo tarde y no hemos pescado nada… decidimos dejar para mañana el salto a la Pequeña Isla Fantástica, Menorca. Doblamos el cabo, que es un espectacular bloque alargado de roca que se adentra en la Mar en el extremos NE de Mallorca, y entramos dirección Pollença, ahora nos toca deshacer parte del camino, ceñida a rabiar con 24 nudos de Oeste. Llegamos delante de Pollença dónde un montón de veleros están fondeados. Echamos el ancla a tres metros de profundidad, se ve el fondo perfectamente. Hace tanto viento y estamos tan lejos de la playa que ni tiramos el dingui al agua. Cenita y a descansar.